CLASES PARTICULARES EN LÍNEA - Ha llegado su momento.
Durante los dos últimos años he montado cursos en línea personalizados, por ejemplo:
Estudiantes de 2º bachillerato de biosanitario que en 20 días quieren hacer una preparación intensiva de tipo de preguntas de selectividad de biología y química que son las que más les ponderan para la nota de acceso.
Estudiantes de último curso de grado superior que a lo largo de su año quieren preparar la química y/o la biología de selectividad para poder entrar en grados universitarios.
Alumnos de algún curso de grado universitario que tienen falta de base por sus estudios previos, por ejemplo, de estadística, bioquímica o fisiología o a ingeniería biomédica sin haber cursado biología.
Este curso he trabajado, tenía muchas ganas de probarlo, la clase particular en línea, es decir, esas sesiones sesiones en la que un estudiante o a lo sumo dos estudiantes amigos iban a casa del profesor y trabajaban cara a cara. Me acuerdo que hace décadas era también profesor particular. Siempre lo he echado de menos y me alegro de haberlas recuperado en este nuevo formato.
Hay diferencias notables entre un curso en línea y unas clases particulares virtuales que de virtual solo tienen el nombre porque son muy reales y eficaces.
El curso on-line tiene la siguiente estructura:
Un plan con objetivos a lo largo del tiempo
Materiales que el profesor cuelga
Plazos
Una plataforma de interacción.
Y con esta planificación y entorno el cursillista va trabajando
Las clases particulares en línea son más vivas y se adaptan día a día a la vida del estudiante y su necesidad. La clase particular se diferencia, sobre todo, en que las sesiones de trabajo con conexión directa a lo largo de la semana son el núcleo del trabajo, con la enorme ventaja de que puede incorporar las características idóneas del curso en línea, sobre todo los materiales digitales creados por el profesor, y el uso de una plataforma de interacción que trasciende a las sesiones de trabajo. En definitiva este modelo de clase particular es un ejemplo claro de aprendizaje semipresencial (Blended learning) ya que además de las sesiones presenciales en línea permite la consulta y trabajo de los materiales digitales ya presentados.
El mundo digital hace mejor la clase particular ya que todo queda ordenado, evaluado y comentado y se puede volver a ello en cualquier momento y, por supuesto, tener una planificación de la sesión de trabajo previa que permite prepararla mejor tanto al profesor como al alumno.
Otra ventaja es la evidente: el estudiante no pierde tiempo en ir y venir a casa del profesor.
En otro artículo mostraré mi experiencia práctica pero estoy muy contento con las dos pruebas (alumnos) que estoy haciendo este curso, pero vaya por delante que el estudiante debe disponer de una infraestructura digital adecuada:
Una pantalla táctil, y si se tiene un lápiz táctil, mejor.
Un sistema de videoconferencia y saber compartir pantalla.
Un cuaderno de notas digital de interacción con el profesor. Yo uso OneNote, es la mejor herramienta que conozco.
También necesita adquirir hábitos digitales como el orden, evitar la acumulación, la sincronización entre varios dispositivos, etc. (habilidades blandas), pero también se lo enseño y, puede que hasta tan importante como el contenido (habilidades duras).
